LA DECISION DEL C.P. DEL PLD

Como si hubiesen tenidos a manos el libro el Arte de la Prudencia de Baltasar Gracián, los miembros del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana, acaban de adoptar una prudente decisión partidaria, que lo hace crecerse ante la clase política y la sociedad en general, consistente en dejar en manos del Congreso Nacional la autoridad y libertad de aprobar la ley de partidos y agrupaciones partidarias.

Baltasar Gracián, en la página 13 de su libro indicado, establece “que el jugador nunca mueve la pieza que el contrario espera y mucho menos aun la que el competidor desea’’. A mi modo de razonar, esa fue la luz que orientó al organismo de dirección del partido gobernante con la importante decisión en esa materia, pues saca del organismo político y deja en manos del congreso, como debió y debe ser, para que en ese escenario plural y con criterios jurídicos-legislativos, los legisladores, investidos de plenitud de soberanía y discernimiento legal, le aporten al país un instrumento legal consensuado, con el voto legal-institucional, y así, fortalecer la institucionalidad democrática.

Con la decisión de dejar el debate de la ley partido y el controversial tema, de primaria cerrada o abierta, separada o simultánea, el Comité Político se quita de encima un asunto, que causa escozor a lo interno de la organización, de los partidos competidores, y de la sociedad en general, pues en el actual estadio de desarrollo de nuestra democracia, nadie está por permitir que le impongan decisiones y más si quien lo hace es un adversario.

La decisión adoptada es una salida ganar-ganar, para las colectividades partidarias, la sociedad civil, ciudadanos, los especialistas del derecho constitucional, los competidores, adversarios y muy especialmente los legisladores, pues asumen su rol de hacedores de leyes, con independencia, sano juicio y consenso legislativo.

Llegó el momento para que nuestros legisladores se pongan a la altura de las circunstancias, asuman su responsabilidad y aprueben la ley esperada y así hemos ganado todo, y rodeamos el venidero proceso electoral de mecanismos de transparencia y legitimidad.

POR: NERIS ABREU COMAS/7/2/18