COVID-19 la solidaridad y medicina preventiva.

Opinión.

El COVID-19 ha puesto en movimiento todo el mundo. Los dominicanos no estamos exento de eso. El Estado a través de su máximo representante el presidente Danilo Medina, se ha hecho sentir profundamente en la población. Anuncia una serie de medidas que incluyen la nación entera. Expresa preocupación, por la gravedad sanitaria existente en el país a raíz de la pandemia COVID-19.

Las medidas toman en cuenta los sectores vulnerables y especialmente los alumnos de la Jornada Escolar Extendida. No queda muy claro la entrega de alimentos del programa de alimentación escolar: Crudo o cocido, por familia o por estudiante; quien lo recibirá el niño o el padre. Esta medida puede traer dificultades.

Los directivos del INABIE deben pensar muy bien cómo implementar esta medida de manera que la población quede satisfecha y sea testigo de una buena decisión administrativa.

Las masas desposeídas poseen alguna protección por medio de los distintos subsidios gubernamentales que recibe este sector: bono luz, bono gas, seguro médico, comer es primero, en su tarjeta de solidaridad.

Es un momento de solidaridad y un compromiso moral con esta nación, preservar la vida es lo primero. Que no sea un motivo de lucro y enriquecimiento de algunas personas.

La activación de los organismos del plan social y comedores económicos, deben priorizar y alcanzar los sectores de mayor vulnerabilidad. A los que en realidad lo necesiten y puedan sacar mayor provecho.

En verdad la decisión de declarar el país en estado de emergencia afecta bastante la economía que sustenta la nación, ahora consumiremos y eso tiene consecuencias. Hay que reconocer esa capacidad de sacrificio del gobierno dominicano para preservar la vida y la salud de sus gentes.

Los pequeños negocios los suplidores de alimentos están protegidos por la medida.

Hay sectores productivos que quedan desprotegidos, más bien hay que buscar una salida para que estos puedan seguir subsistiendo. Algunos trabajadores pueden quedar sin empleos.

Este pueblo nacido en el mismo trayecto del sol sale de esta situación y exhibe el logro de haber combatido con dignidad un mal que se inició en los países más ricos y las personas afectadas han sido pudientes.

Ojalá que esta situación sea una puerta abierta para ver que fortalezas poseemos y las medidas preventivas que deben tomarse, en cualquier catástrofe.

Si desde el anuncio en China y su conversión en un virus global, de esta infección se hubieran tomado las medidas preventivas, como en otros países, por ejemplo Rusia, Cuba, solo han registrado un solo caso. Cerrando fronteras y la higiene. 

La medicina preventiva es la mejor. Solo que en los sistemas capitalistas como el nuestro se piensa más en los beneficios que en la vida. Ahora la mejor medicina es lavar las manos con agua y javón repetidas veces. Esta debe ser una medida que debe permacer para siempre. Cuantas enfermedades se habían evitado con procedimientos higiénicos.