LA VIDA ES UNA FIESTA II

EL MATERO, SANTO DOMINGO.- Si amas el dinero a lo sumo llegaras a un banco, pero si amas a la vida, seguramente llegaras a Dios. No hay que estar fuera de la vida juzgándola sino dentro de ella viviéndola.

Si no tengo apego a nada, si no tengo ningún prestigio ni imagen, si no tengo nada que perder y nada que cuidar, entonces nada me afectara y tendré tiempo para vivir mas libre. El secreto esta en tener menos para tenerse mas.

Vivimos todavía en un paraíso terrenal, mares, montañas, delfines, vinos, frutas, mujeres y tantas cosas hermosas que nos brinda la vida; no es cuestión de situación sino de actitud. Lo importante no es llegar al final sino disfrutar todo el camino, todo el trayecto. Dice un proverbio chino : Si quieres ser feliz por un día emborráchate, si quieres ser feliz por una semana cásate, pero si quieres ser feliz toda la vida se jardinero, es decir, gozar todo lo que nos ofrece el mundo y cuidarlo para el que vendrá.

La vida es un sueño y cada sueño es un ensayo de la muerte y cada despertar un ensayo de la resurrección. No te aferres a ninguna religión, que tu propia religión sea creer en ti mismo. Decía Sai Baba: hay una sola raza la humanidad, hay un solo idioma la del Corazón, hay una sola religión la del amor y hay un solo Dios…. Y esta en todas partes. Dios no es bueno ni malo, es Dios.

Para finalizar, uno mismo escribe su propia historia, no dejes que nadie te la escriba por ti. Baila con tu canción y no con la que te toques. Decía Cortazar: primero amas, y después haz lo que quieras. Entrégate a la vida con toda la pasión y vive descaradamente feliz.

Buscando el bien de los demás encontramos siempre el nuestro. Actuemos siempre con el Corazón antes que intervenga la cabeza, que solo guarda cosas viejas en nuestra memoria. Lo que se hace con el Corazón se hace siempre con amor.

No perdamos la oportunidad de vivir en armonía, en alegría, en felicidad, en paz; en esta maravillosa aventura que es la vida. Definitivamente la vida no es un problema, es realmente una maravillosa fiesta.

Henry Quiñones
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