​El debate político es una construcción de conocimientos.

Vivimos en una sociedad que por sus niveles educativos pocos ciudadanos comprenden el funcionamiento del Estado. Ante un eventual debate político poco pueden cuestionar y aportar. En la escuela de la vida si existiera una cultura de debate en dominicana de forma sostenida, una mayoría entraría en la discusión.

Estaría de acuerdo con los que creen, hay que instituir el debate político en la República Dominicana, Porque representa otro nivel, en consecuencia el mismo sujeto o el candidato a un puesto, se pule, capacita en el contexto del cargo y en la carrera política.

Aquellos candidatos que no son políticos, ni profesionales, vienen de distintos sectores y no poseen un discurso que les dé identidad. Les toca la ardua tarea de prepararse estudiando los perfiles del puesto, empapándose de las necesidades de la gente y construyendo propuestas competitivas que desarrollen la comunidad.

Esto en el futuro será imperecedero, porque  la iglesia, el sector empresarial y todos los sectores que componen la sociedad dominicana desean saber qué pasaría con ellos en el gobierno que sigue en los próximos años.

En tal sentido los tiempos nos dicen que el debate debe entrar en las leyes que regulan los procesos electorales. Por lo tanto las próximas generaciones de políticos deben prepararse para ello.

Ahora los candidatos han expuestos su propuestas a través de distintos medios de comunicación, televisión, radio y las redes sociales, pero, esos temas no se han llevado a debate que confirmen su viabilidad, permitan ser evaluados y el próximo gobierno estemos representados todos.

El debate no debe ser exclusivo para candidatos presidenciales, debe ser a todos los niveles, debido a que aporta al conocimiento, a la construcción de nuevos textos y el crecimiento político de la población.

En este momento era propicio el debate debido a las características especiales del proceso electoral en medio de una pandemia. Situación que obliga a suspender las caravanas  y los discursos presenciales, donde el candidato expone sus ideas cara a cara con el votante.

Finalmente los tiempos irán cambiando el estado de las cosas. Una sola voz para que se institucionalice el debate político, porque representa un paso de avance en el sistema político y electoral.