​Reflexión del Sábado Santo.

|



El Sábado Santo la Iglesia se organiza alrededor del sepulcro de Jesús, reflexionando el viacrucis de su pasión y muerte, su bajada a las tinieblas y espera en silencio y ayuno la resurrección, aleluya del Señor.


Se silencian las campanas y los tambores. Cantan el aleluya el Señor resucito, casi en secreto, es día de silencio. Es día de meditar profundamente sobre esta ausencia. Observar el altar en total silencio, sufrimiento y humildad.

Desde el viacrucis del viernes santo la cruz queda instalada, cubierta de rojo, esperando la victoria con el laurel, Dios vence su dolor por la borra del pecado del mundo.


El señor que se hizo verbo entre nosotros, esta callado, después de su último discurso, padre porque me has abandonado. El señor esta fuera de combate. La muerte lo silencia, todo se ha consumado. Luego de esa tranquilidad, su voz clama cada día en su pueblo, por lo que todos son redimidos.


Este momento su maestría se hizo plena, todos los que presenciaron su muerte, en este momento de su vida pudieron ver la plenitud de su gloria. Al igual que el pueblo de Dios se regocija cada día cuando él se manifiesta en su vida, redimiéndole de sus pecados y preocupaciones.


El sábado santo es un día, es un día que se siente la ausencia del señor, esa tranquilidad se llena de esperanzas, a todo el mundo, los que le toco el reto de matarle y los que solicitaron su crucifixión tuvieron frente a la realidad. Perdonados y esperanzados en ser redimidos y cubiertos por su sangre preciosa.


El silencio y la meditación, es parte de la vida diaria, cuando el sufrimiento y el dolor atacan al ser humano. Familiares y amigos de su entorno no encuentran palabras para consolarles, se manifiesta ese silencio que los arropa. Se impone la meditación, sobre el dolor sufre la terrible realidad humana. Solo Jesús con la esperanza de una vida nueva puede sanar.


La muerte es el misterio que angustia a la humanidad. Jesús pasa por ella desciende a los infiernos. Dejando una impronta a todos los hombres. Una especie de resurrección en la vida y en la muerte. Resucitemos con Jesús, de todo aquello que no nos deja ser libres.


Con todo este acontecimiento de la pasión, muerte y resurrección del Señor Jesús este, redime al mundo, trayendo la paz, la esperanza, el amor y la fe al mundo entero. 

​Reflexión del Sábado Santo.

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.

Para recibir nuestras noticias o hacer denuncias, escribanos al correo diarioelmatero@gmail.com o al Whatsapp 829 232 5283