​Perspectivas de una ley de partido.

La idea de una ley de partido se concretiza en un modelo de democracia favorable a un trato humanitario, respetuoso, igualitario a las personas no importa su raza, credo e ideología, como lo exige el silo XXI. Esta es una ley conveniente para la aplicación de la justicia y la participación libre de los ciudadanos congresionales y municipales  en igualdad de condiciones, en los procesos para elegir los representantes a los distintos estamentos, presidenciales, , municipales y otros representantes a nivel nacional e internacional, impidiendo la imposición de candidaturas que en estos tiempos vienen perjudicando los pueblos, cuando un mismo grupo disfruta por décadas del mismo puesto, que no representa la mayoría, ni le importa los destinos de la patria.

Con una ley de partido hay que acogerse a lo establecido y ciertos manejos y trajes a la medida tienden a desaparecer, es imposible detener el avance de las sociedades, no se puede seguir viviendo en una sociedad primitiva, ahora la ley no puede aprobarse con vicios imponiendo conveniencias de grupos mayoritarios porque de nada vale, se seguirá en lo mismo. En tal sentido hay que tomar en cuenta los factores que influyen positivamente y negativamente, hay que ver las fortalezas y debilidades antes de proceder a darle curso.

Indudablemente para tener una ley de partidos que represente los intereses de la mayoría y especialmente al pueblo que es el principal afectado de las medidas que se toman en las altas esferas de los partidos. Olvidaba que la ciudadanía no cuenta ante los intereses de sectores políticos y económico que controlan el poder en una nación.

De todos modos, es imposible poner sobre la mesa una ley sin tomar en cuenta todos los factores que influyen algo hay que dejar caer, de no ser así en poco tiempo habrá que volver a modificarla reflejando el bajo nivel de los actuales representantes del poder legislativo, se han centrado en las primarias abiertas sin tomar en cuenta otros elementos que corresponden a esta ley los cuales pueden no ser positivos para la ciudadanía y para los partidos o componentes que requiere la ley para poder implementar elecciones primarias simultaneas y abiertas.